domingo, 3 de enero de 2021

 



VEGANISMO  

                No recuerdo exactamente desde cuando se ha inventado la palabra “Vegano”, veganismo. Creo que hace más de una década... y menos de dos. Antes se hablaba de vegetarianismo, y por lo general decir “soy vegetariano” quería decir que, además de comer vegetales, comías también derivados animales como leche y lácteos como el queso, huevos y miel. De hecho a los vegetarianos puristas se les llamaba “Vegetalianos”; pues estaban los vegetarianos que comen también derivados animales pero nada de carne y pescado, y estaban los más ortodoxos, o como queramos llamarlos, que solamente comen productos de origen vegetal y que ahora se definen como veganos. Personalmente como palabra me gusta más “vegano” que “vegetaliano”, me suena mejor... la palabra “vegetaliano” ha sido recortada o abreviada.
 

                Pues me complace escribir algunas líneas al respecto; como bien sabemos la naturaleza primitiva del Ser Humano es depredadora al igual que la de los otros animales…. En el reino animal hay instinto pero no hay consciencia, en el Ser Humano a diferencia de otros animales hay también Consciencia, y desde mi punto de vista esto es lo que nos diferencia, sustancialmente, del resto de la fauna terrestre. Sobre este punto se podría filosofar, argumentar y analizar infinitud de matices, pero no es esta mi finalidad en el contexto del blog.
 

                 Me limito a analizar algunos aspectos, los que me llaman más la atención, y a compartir mi visión al respecto; dentro del reino animal hay animales que por su naturaleza son carnívoros, animales omnivoros y animales vegetarianos. En el post que puedes leer a continuación de éste, argumento algo también al respecto de esta cuestión: “¿debería ser el Ser humano carnívoro, omnívoro, vegetariano (ovo-lácteo) o bien vegano?”, para que cada persona opine y traiga sus propias conclusiones;
 

                 Pero lo que quiero destacar o compartir es una reflexión que personalmente me ayuda a entender nuestra Naturaleza, o enfocar mejor la finalidad de la evolución humana dentro del contexto de la alimentación, del arte culinario aplicado al concepto cultural, de nuestros orígenes antropológicos, de nuestras tradiciones, de nuestra salud que como bien sabemos, o deberíamos de saber, depende en gran parte de la cocina que elaboramos a diario y de cómo comemos, de qué productos ingerimos, de su calidad, de su procedencia, de nuestra relación con la Tierra Madre y sus reinos de los que somos parte.
 

                  En este sentido, tanto los macrobióticos como los veganos, prescinden totalmente (por su filosofía de vida) de todo tipo de derivados de origen animal; nada de lácteos, nada de huevos, nada de miel…. No obstante los primeros (la macrobiótica es una cultura y filosofía de vida muy antigua originaria de Japón con fundamentos interesantes que merecen ser considerados) incluyen en su dieta algo de carne y/o de pescado blanco, por lo general una comida semanal. El punto sobre lo que coinciden ambas, macrobiótica y veganismo, es que no tenemos el derecho de explotar a los animales, el reino animal en general, para nuestra subsistencia en términos de alimentación. Personalmente considero respetable dicho principio, así como considero respetable la visión Indú, básicamente vegetariana en su origen, que incluye derivados lácteos y leche en su dieta. El punto que quiero destacar es la importancia de “no explotar” el reino animal (seres humanos incluydos), ni el reino vegetal, ni nuestra Madre….. la Tierra.